La Catedral Metropolitana de Santiago Apóstol, conocida popularmente como la Catedral Vieja de Managua, es uno de los símbolos más emblemáticos de la capital nicaragüense. Su historia está llena de curiosidades que la convierten en un lugar único, no solo en términos religiosos, sino también como testigo de la historia de Nicaragua. Aquí te dejamos cinco datos interesantes sobre este histórico templo:
Diseño con influencias europeas
La catedral fue diseñada bajo la influencia de la arquitectura neoclásica y, sorprendentemente, su estructura de hierro fue inspirada en una iglesia europea. Existen versiones que mencionan que se basó en una iglesia belga, mientras que otras aseguran que las líneas de su diseño fueron influenciadas por la arquitectura francesa. Lo cierto es que los planos fueron elaborados por el ingeniero suizo Pablo Dambach, quien adaptó el diseño a las características locales, pero utilizando elementos europeos característicos de la época.
Un templo levantado con impuestos al café
Para financiar la construcción de la Catedral de Managua, el gobierno de Nicaragua ideó un impuesto especial sobre la exportación de café. Cada quintal de café exportado debía aportar un dólar para reunir los fondos necesarios para la edificación. Esta medida fue respaldada por el Congreso Nacional y permitió la creación de este imponente templo, que sería un símbolo del catolicismo en el país.
El terremoto de 1972 dejó su huella
El terremoto que devastó Managua el 23 de diciembre de 1972 causó graves daños en la Catedral Vieja. La estructura metálica de la iglesia, que originalmente fue de hierro traído desde Bélgica, quedó severamente afectada. Aunque su fachada logró mantenerse en pie, el edificio quedó inutilizable para las ceremonias religiosas y no ha sido restaurado completamente desde ese entonces. A pesar de los esfuerzos por restaurarla, la catedral sigue siendo un monumento en ruinas.
Escenario de ceremonias históricas y momentos clave
La Catedral Vieja de Managua fue testigo de numerosas ceremonias religiosas que marcaron la historia de Nicaragua. Uno de los eventos más significativos fue la celebración de misas y Te Deum en honor a figuras políticas de gran peso en el país, como la familia Somoza, quienes asistían frecuentemente a este templo para eventos oficiales.